sábado, mayo 10, 2008

El ciclo de regreso

El ciclo sin fin me coloca ahora en el escalon emotivo más bajo. Regreso al punto de partida. A la incertidumbre. Me descubro solo, no encuentro a nadie que verdaeeramente me comprenda como para vaciar mi carga y recibir sabiduría. Solo puedo conseguir consuelo y comprensióny no me basta ya, gracias a Dios eso no me falta, pero ahora quiero sabiduría, guía. Necesito lo que yo siempre tiendo a dar... en verdad me siento perdido... y no encuentro las señales... o no sé interpretarlas.
Dios sí que sabe dónde estoy y me dice que no me deje sucumbir a la depresión, recibo buenas noticias, conozco gente maravillosa y rebosante de luz, cosa casi inaudita, también descubro en mis conocidos talentos y cosas hermosas... sin embargo me he visto a mí mismo en un espejo. He atravesado al otro lado como alicia y descubrí que el juego de cartas me hace perder, vi mis miedos de frente y mis ilusiones pendieron de un hilo al descubrir a mi verdadero traidor: yo mismo.
Dios me pone en bandeja de plata lo que le pido, y temo que al tomarlo pierda lo que he recibido antes...
Ruego por no ser desamparado y me hago de tripas corazón para avanzar sin ayuda, sin más sabiduría que la que yo encuentro siempre en mi interior... y rehago mi lista de deseos, pues ahora confirmo que lo que uno pide se concede, y ya no quiero varias cosas que no me ayudan a crecer.
Empiezo con mi lista: Quiero ver a Dios y sentirlo en cada momento, en cada persona, en cada objeto material e inmaterial, en cada espacio y en cada tiempo para poder contactar por siempre con la sabiduría y poder así venerar y honrar mi propia vida, que también es parte de Dios. Nunca desconectarme de esta luz infinita de paz y armonia. Regresar a mi verdadero hogar, que es Dios.

No hay comentarios.: